viernes, 5 de abril de 2013

EL DÍA QUE DIONISIO TORRES ENTINTÓ A CARMINE INFANTINO

Dionisio Torres Moreyra
El reciente fallecimiento del veterano dibujante norteamericano Carmine Infantino el último 4 de abril, nos trajo a la mente una inolvidable reunión sabatina de inicios de los 80. Muchos dibujantes vivían cerca de nuestra casa y solíamos reunirnos en una pequeña bodega que en aquellos años teníamos. Dionisio Torres, Julio Condezo, José Málaga, Bernardo Prado, Antonio Torres y algunos -4 o 5- más jóvenes conversábamos durante varias horas de la tarde -y muchas veces de la noche- sobre todo lo relacionado al dibujo, la historieta, sus autores, sus anécdotas, sus vivencias y sus infaltables y sonoras bromas. Una de esas tardes Dionisio llevó una revista norteamericana "Creepy", de ciencia ficción y terror - publicada un par de años atrás- en la cual contenía una historieta firmada por Carmine Infantino -quien hizo los lápices- y cuyas tintas y acabados habían sido hechos por él. El trabajo lo había realizado por intermedio de Pablo Marcos, uno de nuestros dibujantes de moda en aquellos años en los EEUU y colaborador permanente de la Warren Publishing. El inconfundible trazo de Dionisio había logrado destacar más aún los lápices de Infantino. Sus "efectos" y las "tramas" lograron un gran impacto visual en dicha historieta, la misma que recibió halagadores comentarios entre los norteamericanos. Muchos le preguntaban a Pablo por ese "buen entintador y dibujante peruano". Dionisio Torres, siempre humilde y de perfil bajo, decidió no entintar más una historieta de otro dibujante y se dedicó solo a hacer los lápices de muchos cómics de Marcos Ortega, para evitar así ser constantemente asediado y seducido para trabajar en el país del Tío Sam. "Nunca dejaría mi país ni por todo el oro del mundo, porque el dinero no lo es todo en la vida, Martíncito", nos solía decir, Dionisio. Y así fue...
Carmine Infantino (1925-2013)

"Mami and boys" (Lápices: Carmine Infantino/ Tintas: Dionisio Torres)

2 comentarios:

  1. Mi padre siempre humilde y sobretodo muy apegado a la familia. Nunca quiso salir de esta hermosa tierra y de su precioso Ayacucho. Y prueba de ello es sus imborrables trazos con Morochucos, caballos y sabor a yaravíes. Trabajos como Hilario Puma y otros destacaron siempre sus raíces. Te quiero papi y siempre seré tu admiradora número 1.

    ResponderEliminar